Suministro inteligente La cadena del futuro

Uno de los elementos que se ve afectado por la crisis y la globalización es la cadena de suministro y con ella todas las actividades que abarca.

Éstas van desde la compra de materiales directos, las operaciones, producción, aprovisionamiento, logística, transporte, gestión del ciclo de vida del producto, hasta la estrategia, planificación y tecnologías que permiten gestionar todos estos procesos. Tener una visión integrada de todos estos elementos es muy importante para poder optimizar la cadena y conseguir que ésta aporte valor a la compañía.
Conocer los desafíos a los que se enfrentan las empresas a lo largo de sus procesos de suministro es importante para saber los instrumentos, acciones necesarias para conseguir una cadena inteligente. Con este objetivo, la multinacional IBM consultó la opinión de 400 directivos de 25 países y 29 industrias diferentes. El análisis de sus respuestas se ha plasmado en el estudio “La cadena de suministro inteligente del futuro”.

Complejas y globales
Según los expertos, en los próximos tres años se producirá una mayor deslocalización de los procesos de producción y de compras hacia países de bajo coste (Asia y Europa del Este), reduciéndose hasta en un 30% estas actividades en la Europa Occidental y un 15% en Estados Unidos, mientras que aumentarán en un 61% y un 43% en los dos primeros, respectivamente.
Esta tendencia llevará, tal y como indicó en la presentación del estudio David Soto, vicepresidente de IBM Global Business Services, hacia cadenas cada vez más complejas y globales, que presentan cinco desafíos importantes para las compañías: contención de costes, visibilidad de toda la cadena, gestión de riesgo, clientes más exigentes y la globalización en si misma.
La contención de costes será aún más la prioridad del responsable de la cadena, siendo la flexibilidad y la agilidad las características que regirán a las fórmulas de suministro más inteligentes. “Para reducir costes, las empresas seguirán con la externalización de procesos”, remarca Juan Miguel Rovira, director de soluciones para la cadena de suministro de IBM.
Los nuevos modelos requerirán de una mayor conectividad, colaboración e integración de procesos entre la red de partners (subcontratistas, proveedores, socios tecnológicos…) para mejorar la visibilidad de todo lo que ocurre. El 75% de los directivos encuestados considera que los silos o departamentos organizativos limitan la visibilidad de la cadena, y faltan incentivos para colaborar y compartir información.

Gestión de riesgos
Las compañías deben gestionar los riesgos de la cadena a priori, para evitar una ruptura en el proceso que eleve los costes. Sin embargo, sólo el 38% de los directivos consultados asegura que cuenta con indicadores que alerten anticipadamente ante posibles riesgos para que las empresas puedan poner en marcha planes de contingencia antes incluso de que se produzca la interrupción.
Otro reto al que se enfrentan las empresas es el de escuchar al cliente durante todo el ciclo de vida del producto. “Mayoritariamente tienden a centrarse más en sus proveedores –remarca el estudio- mientras que sólo el 47% habla con el cliente”.
Además deben buscar una mayor eficiencia en términos de costes, calidad, cumplimiento de compromisos…, “ya que la globalización ha permitido a las empresas mejorar sus márgenes, ventas, rendimiento general pero no sus costes en el nivel previsto y ha provocado efectos negativos como el aumento de los plazos de entrega, descenso de los niveles de servicio al cliente y menor calidad”.
Por último, la preocupación por la sostenibilidad del medio ambiente estará cada vez más presente en las compañías, “dejando de ser viables, según el informe, las cadenas de suministro que no tengan en cuenta el impacto sobre el hábitat”.

Conclusión
La gestión de la cadena de suministro está actualmente muy fragmentada en las empresas y esto reduce su eficacia. “Las compañías que aspiren a tener una cadena de suministro inteligente han de construir una nueva organización, con un único director global”.
Este directivo se encargaría de tener una visión completa de toda su actividad, orquestar todos los recursos disponibles y optimizar todo el proceso, gobernar tanto sus diferentes áreas como en los diferentes países donde esté presente, hacer de puente con otros departamentos de la empresa para estar alineado con la estrategia global de la compañía.