Rotura de stock. Un 10% de pérdidas en ecommerce de moda y calzado

Para un ecommerce de moda y calzado que factura 10 millones de euros al año, la rotura de stock podría provocarle pérdidas anuales de 1,2 millones.

Las roturas de stock en una tienda online forman parte de los factores principales para que un usuario deje de comprar, con las consecuencias que trae consigo: la pérdida de un cliente potencial y un fan para la marca, además de su impacto económico. 

A este respecto, se calcula que la falta de stock provoque la pérdida del 10% de los ingresos de un comercio electrónico de moda y calzado, ya sea una pyme o una empresa grande. Lo que se traduce en una desviación de los objetivos de venta, en la reducción de la satisfacción del cliente y su fidelización y en mayor probabilidad de que este termine en la competencia. 

Según datos de Harvard Business School, un 9% de usuarios renuncia a la compra ante una rotura de stock; un 37% compra un producto de otra marca y un 21% busca ese mismo artículo en otra tienda online. “Y si esa situación se repite hasta en tres ocasiones con el mismo cliente potencial, su rechazo y frustración aumentará y un 70% no volverá a intentar comprar más en ese ecommerce”, ha asegurado Iñaki García, cofundador y CEO de uSizy

Esta compañía tecnológica ha calculado el volumen de pérdidas que afrontaría un ecommerce que factura 10 millones de euros al año ante una rotura de stock, y donde Black Friday y Navidad representan entre el 40% y el 55% de sus ingresos

En este caso, estaría dejando de ingresar 1,2 millones de euros al año, que podrían incrementarse hasta los 1,5 millones si esa falta de disponibilidad de productos y tallas tiene lugar en este periodo de máxima demanda. 

“A este dato habría que sumar los costes derivados de la gestión del overstock, esas tallas de determinados productos que no se venden, y que están ocupando un espacio en los almacenes que la compañía necesita emplear para las nuevas colecciones”, ha explicado García, quien ha añadido que en esa tesitura, se ven obligados a vender estos artículos con margen de ventas muy bajos o a destruir mercancía por exclusividades o prestigios de marca. 

De ahí que el portavoz de la firma recomiende la puesta en marcha de programas basados en inteligencia artificial que ayuden a calcular el volumen de ventas futuro y el ritmo de consumo de stock. Además de conocer cuáles son los productos y las tallas más demandadas por los usuarios en su tienda online y predecir cuándo se dará el momento de rotura de stock. 

Este tipo de herramientas reducirían entre un 5% y un 10% estas pérdidas según la capacidad operativa de la tienda. En el ejemplo expuesto, elevaría la facturación anual en 125.000 euros, asegura.