Negocio agridulce

España es un país de aderezos. Nuestra cultura gastronómica, con diversidad de recetas mediterráneas, impone el uso de aceite, salsas y condimentos. Salpicamos nuestros platos con ‘toques’ de sabor, pero somos más conservadores que innovadores. Sólo empleamos la quinta parte de las variedades existentes en el mercado.

El aceite y el tomate sustituyen en muchos casos la compra de otras especialidades más exóticas o novedosas. Por tanto, la demanda de ambos se impone al resto de especialidades. En los canales de alimentación, las ventas siguen subiendo.

PRODUCTO REY
El aceite de oliva ha crecido un 8,3%, impulsado por el alza de los precios, mientras que el valor del tomate frito se ha incrementado casi un 4%, favorecido por la versatilidad de un producto que puede adquirirse ya frito y en brik, lo que también ha derivado en un ligero aumento del volumen (+ 0,3%), que no se ha producido en el aceite (- 1,8%).

Estas evoluciones, resultado del análisis de la distribución de aceite y tomate frito en hipermercados y supermercados, recabada por IRI, delata las oscilaciones del mercado del aceite. Los últimos datos de la consultora apuntan un total de 1.102 millones de euros por la venta de más de 505 millones de litros/kgs de las variedades oliva y girasol. Algo más modestas, las ventas de tomate frito en libreservicio sumaron más de 226.000 millones de euros y 155 millones de kgs.

Este subsector sigue dominado por el formato en brik (59,3% en valor y 68,7% en volumen), quedando una porción menor para el resto. Dentro de esta familia, IRI incluye ketchup y mostaza que sumados arrojan unos ingresos de 70 millones de euros, sustanciados en cerca de 26 millones de kgs de producto, lo que supone incrementos del 2,3 % y del 1,4%, en valor y volumen, respectivamente. La mayor participación corresponde al ketchup (81,7% del gasto y 88% de la demanda).

OLIVA, MASTER CHEF
En cuestión de aceites, el grueso del negocio es para el aceite de oliva, master chef del mercado, que, con más de las tres cuartas partes de la facturación (78%) y más del 63% de la demanda, incrementó casi un 10% su valor, hasta los 859 millones de euros y contrajo cerca de un 3% su volumen, hasta los 319,4 millones de litros.

Por su parte, la variedad de semillas, con el 22% de los ingresos y el 36,8% de la demanda, captó 243 millones de euros y 186 millones de litros, lo que generó un aumento del 3,3% en el valor y mantuvo estable el volumen.

En lo que se refiere a subsectores de oliva, las mayores participaciones se lograron en la especialidad ‘suave’, con niveles del 38% que, no obstante, significaron un recorte de dos puntos porcentuales, respecto al año anterior. El aceite virgen extra captó el 30,6% del valor total y el 27% del volumen, cayendo prácticamente en la misma proporción que el anterior. El tercer peldaño fue para ‘intenso’, que alcanzó el 19,2% de las ventas y el 20,6% del volumen, prolongando su caída con ligeros descensos.

Por lo que respecta a semillas, la alta penetración del aceite de girasol, con más del 90% del segmento, vuelve a eclipsar la actividad de los aceites de maíz o soja, que apenas llegan al 1%.

MERCADO CONVULSO
Primer productor de aceite de oliva, con amplias extensiones de cultivo del olivar, España es un país con tradición aceitera, que se abre paso en los mercados internacionales, compitiendo con países como Italia o Turquía. Sector convulso, donde los haya, con continuas variaciones de los precios en origen, el aceite se ha convertido en punto de mira de la gran distribución, que ha ejercido una férrea presión sobre los márgenes.

El alza de los costes en origen salpica a toda la cadena del sector, desde los ganaderos, que manifiestan su descontento, a través de organizaciones como COAG Andalucía, que incrimina a la CNC por no corregir la anomalías del mercado; los distribuidores, que echan mano de importaciones para vender más barato y los consumidores, resignados a comprar aceite de oliva con un diferencial de precio, que puede llegar hasta el 64%, según la enseña elegida, tal y como ha denunciado Facua.

Todo ello, en medio de una campaña que no ha sido todo lo buena que cabria esperar. Según los datos de la Agencia para el Aceite de Oliva (AAO), entre octubre de 2012 y julio de 2013, se produjeron 614.700 toneladas de aceite de oliva, un 62% menos que en la campaña anterior. Los productores tienen los ojos puestos en la temporada 2013/2014, que esperan sea mejor que la última.

El desplome las exportaciones a Italia, ha sido uno de los motivos de la caída del sector.

No obstante, se prevén mejoras de cara a la próxima campaña. El presidente La Asociación de Industriales y Fabricantes de Aceite de Oliva de Jaén (Infaoliva) estima que la producción 2013-2014 podría doblar a la actual, que finaliza en septiembre, aunque advierte que “el enlace que quedará entre una y otra campaña será mucho menor”.

GRAN CONSUMO
Volviendo al terreno de gran consumo, en el que se mueven los distribuidores, el negocio de aceite sigue en manos de la marca propia (MDD), con cuotas del 64,5% en valor y de casi el 72% en volumen y creciendo, nada menos que casi un 5% en valor y cerca del 6% en demanda, según los estudios de IRI. La empresa Sovena, interproveedor de Mercadona, lidera las ventas de envasado y es el mayor representante de la MDD en el mercado nacional.

La marcas de Deoleo, Carbonell (9,4% en valor y 6,3% en volumen), en segundo lugar y Koipe, en quinto, con algo más del 3%, se mantienen entre los primeros puestos marquistas, junto a Ybarra -Grupo Ybarra-Migasa -(4,1% y 3,6%) y Coosur -Aceites del Sur- (3,6% y 3,2%).

DINAMISMO EN SALSAS
Las salsas se han convertido en uno de los ingredientes con mayor penetración en los hogares españoles. El universo auditado por IRI refleja el dinamismo del sector en categorías las salsas ambiente, que en el último periodo generaron crecimientos del 6,3% en valor, hasta los 113,4 millones de euros, y del 5,8% en volumen, hasta los 22 millones de kgs.
Una tendencia manifestada en los cuatro subsegmentos de esta familia: salsas frías, con variaciones al alza, que rondan o superan el 7%, y dominio del mercado (58% en valor y el 54% en volumen). Pero, a pesar de su alta participación, no son las que más crecen, mérito que corresponde a la variedad de salad dressing, que sube por encima del 8% en valor y del 17%, en volumen, a cambio de ostentar los niveles de participación más bajos (12,5% y 11,7%, respectivamente).

Las salsas para pasta y las de cocinar consiguen progresiones más moderadas, aunque significativas, más del 2% en la demanda en ambos casos y casi el 5% en la facturación de las segundas. Su evolución les permite conservar el segundo y tercer puesto en el conjunto.

FRESCAS Y MAYONESAS
Mención aparte merecen las salsas frescas para pasta y la mayonesa, ésta última considerada como ‘salsa fría’. El primer grupo constituye una parcela más amplía integrada por siete subsectores, con un total de 12,7 millones de euros y 12,7 millones de kgs, alcanzados en el último periodo, lo que supone un retroceso del 3% en ventas y un discreto avance en volumen (+0,2%).

Ligera contracción también para el volumen de mayonesas (-0,2%), un total de 52,2 millones de kgs y estabilidad en las ventas, situadas 161,1 millones de euros. La mayonesa ‘normal’ sigue mandando en el conjunto (61,2% en valor y 66,4% en demanda), quedando algo más de la mitad a repartir entre las divisiones light (34,4% y 30,2%) y otras especialidades (4,4% y 3,4%).

DOMINIO DE MDD
Las salsas y mayonesas siguen lideradas por la marca del distribuidor. Su cuota avanza en hipers y supers y alcanza ya más del 52% de la demanda en salsas ambiente; el 43,6% en mayonesas y el 65,6% en salsas para pasta. Por lo que respecta facturación, alcanza su mayor peso en esta última, con más de la mitad de las ventas (53,8%); le siguen salsas ambiente donde la MDD capta el 35,4% y mayonesas donde logra el 30,6%.

Las referencias marquistas se mantienen a gran distancia de la MDD. Sólo Ligeresa de (Unilever), con el 22% en ventas y el 15,6% en volumen, en el apartado de mayonesa, y Nestlé, con el 20,8% y 14,2%, respectivamente, en salsas para pasta, logran reducir el margen, que es mucho más ancho en el caso de Heinz, primera marca en salsas ambiente (8% y 5,6%).

ESPECIAS Y HIERBAS, BROTES VERDES
Brotes verdes, crecimiento sostenido, es el que mantiene el sector de Especias y Hierbas, un ‘planeta vegetal’, compuesto por infinidad de especialidades y formatos. En el último año su progresión en ventas ha sido del 3,3%, hasta los 144 millones de euros, mientras que el volumen, 128 millones de kgs, apenas ha variado (+0,3%), considerando la suma de sus cuatro divisiones, fresco, congelado, seco y wet.

Las tres primeras han aumentado su peso en valor, la que más la de fresco (14,7%), con nichos de participación por encima del 10%. Más discreta ha sido la subida de congelados (+ 1%), que lidera el mercado con nichos superiores al 80% y la de seco (+2,5%), con menor representación en el total (6,7% y 7%). El contrapunto del mercado ha sido la caída del volumen en los tres segmentos, leve (menos del 1%), pero real.

Hasta aquí la evolución por formatos, ya que el mercado se puede enfocar desde la óptica de las especialidades, donde caben especies, hierbas, ajos, sazonado y pimientas.
Entre las dos primeras reúnen casi las tres cuartas partes del mercado, liderado por especias (47,5% en volumen y 40,1% en valor), pero todas las secciones han visto crecer sus ventas en el último año. Los mayores aumentos se han dado en la categoría de sazonador, con alzas cercanas al 10% en valor y de más del 5% en volumen. Hierbas y pimientas también experimentan subidas superiores al 5% y 2%, respectivamente.

La demanda se ha comportado de forma desigual y, al margen del repunte anotado en sazonador, ha caído ligeramente en el resto.

La MDD capitaliza las ventas, absorbiendo la mitad el mercado y el 63% del volumen. Con participaciones de dos dígitos, le siguen Ducros – McCormick & Company Inc- y Carmencita, que caminan parejas en el mercado. La primera logra algo más del 14% del pastel comercializado en libreservicio y la segunda el 13,5%, captando ambas el 10% de la demanda. La empresa española Carmencita, con sede en Novelda (Alicante), elabora productos para la marca blanca de Mercadona –Hacendado- y empaqueta la sal y pimienta para Mc Donald´s.
ppascual@daretail.com