Las marcas, un valor añadido para el consumidor y la sociedad

Existen muchas marcas a las que no renunciamos. Son marcas que nos han acompañado a lo largo de toda nuestra vida y mantienen con nosotros una relación afectiva, de seguridad y confianza, que las hace únicas, incomparables y, lo que es más, insustituibles. Son sinónimo de seguridad, confianza, calidad, innovación, garantía, experiencia… Éstos son algunos de los valores que aporta a un producto una marca líder.

Dichos valores son el resultado de un gran esfuerzo humano, una enorme inversión en investigación, estudios, pruebas, y años de confianza de los consumidores, durante los cuales, los fabricantes han mantenido la calidad de sus productos y se han esforzado en conocer al consumidor, en saber en cada momento lo que quiere y en cubrir sus necesidades.

En concreto, para las compañías que fabrican estas marcas, el lanzamiento de un producto lleva consigo un proceso complejo de análisis del mercado, de las demandas de los consumidores; de estudios previos y posteriores al lanzamiento del producto, para comprobar su grado de aceptación; de revisiones continuas de calidad y seguridad; en definitiva, de innovación constante. Estos procesos hacen que cada marca sea diferente de las demás.

Asimismo, la industria de las marcas de alimentación, bebidas, droguería y perfumería, constituye uno de los principales sectores industriales españoles en la actualidad. De hecho, este sector realiza unas inversiones en I+D+i anuales cercanas a los 600 millones de euros y el año pasado tuvo unas ventas netas de 83.000 millones de euros.

Además, estas compañías son creadoras de riqueza para el país y generan empleo de calidad, invierten en formación e, indirectamente, contribuyen a que el sector agricultor y ganadero español sea más competitivo. Se trata del área industrial que mayor dinamismo positivo presenta en el mercado de trabajo actual, con 500.000 puestos de trabajo directos y 1,5 millones de puestos de trabajo indirectos. Es por ello que representa cerca del 7% del PIB español.

Pese al contexto económico actual, las marcas y las compañías responsables de su fabricación continúan manteniendo su crecimiento, lo que les permite ser en la actualidad uno de los sectores que mejor resisten a la crisis, dinamizando así, la economía y el empleo en nuestro país.

(En noviembre de 1974, Ignacio Larracoechea “estaba estudiando 3º de Derecho en la Universidad de Deusto” )