Conservas vegetales. Mercado “enlatado”

El sector de conservas sigue buscando su hueco en el conjunto de la industria alimentaria.

La irrupción de los congelados, los platos preparados y los productos de conveniencia, unida a las campañas en pro de una alimentación natural, han hecho ceder el mercado. Innovación, diversificación y valor añadido son las mejores armas para revitalizar el consumo de un mercado “enlatado”·.

La atomización del tejido empresarial con grupos nacionales y multinacionales operando a la par que pequeñas industrias, dependientes de la agricultura, provoca desequilibrios significativos en un sector lastrado por el contexto económico, donde las dificultades para obtener liquidez están dejando en la cuneta a muchas compañías.

Hacia la reconversión
Las ventas de conservas vegetales en libreservicio no han sido todo lo buenas que cabría esperar. El último periodo analizado por Symphony IRI (52 sem fin 02 may’10/52 sem fin 01 may’11) delata una caída de casi el 2% , tanto en valor como en volumen. La crisis ha hecho que la mayoría de los españoles consuman más en el hogar, reduciendo las comidas fuera de él. Las conservas son un buen aliado de esta tendencia y de hecho existen en todas las despensas, pero, obviamente, “ya no son lo que eran”. Las empresas conserveras intentan sacar partido en una coyuntura difícil donde la pérdida de márgenes, las importaciones a bajo precio y las oscilaciones en el coste de la hojalata – principal material empleado en los envases- dibujan un escenario complicado, que hace necesaria la reconversión. A ello, se suma un escollo insalvable, la pujanza de la MDD en todas las categorías.

Algunas conserveras han optado por diversificar su producción, ampliando su portafolio con soluciones de comida, platos semi-elaborados, platos refrigerados, platos ambiente, salsas, cremas, guarniciones, delicatessen y otras categorías con mayor rotación en el lineal. Tampoco hay que olvidar que no son pocas las marcas de conservas vegetales que comparten enseña en otros sectores de alimentación ajenos a este segmento.

Sigue la atonía
El universo auditado por Symphony IRI, en hipermercados y supermercados, comprende ocho subsectores de conservas vegetales, que en el último periodo alcanzaron un valor superior a los 529 millones de euros por la venta de más de 168 millones de Kgs, lo que supone sendas caídas del 1,9% y 1,8%, respectivamente.

Por segmentos, destaca la participación de los espárragos, que siguen liderando el mercado, con casi un cuarto del negocio (24,8%), lo que supone un total de 131 millones de euros y cerca de 17 millones de Kgs, equivalentes a más del 10% del volumen, una cuota superada con creces por el tomate, que apunta el mayor porcentaje en lo que a demanda se refiere, un 45,4%, que sigue en ascenso, aunque su peso en valor apenas alcance el 16% del total.

Si atendemos a la cifra de ventas, las alcachofas ocupan el segundo peldaño con 105,3 millones de euros (20% del total), y 21,2 millones de Kgs (12,6% del volumen). Al igual que los espárragos, se trata de alimentos, cuyo PVP se encuentra por encima de la media, lo que eleva su participación que, comparada con el periodo anterior, ha caído en las dos categorías. En valor, espárragos y alcachofas pierden 2,9% y 4,3%, respectivamente, mientras que en volumen la contracción ha sido del 5% y 4,9%.

La curva de descenso planea también en segmentos más pequeños como el maíz, que rebaja sus ventas un 2,8%, hasta los 60,9 millones de euros, aunque consigue mantener la demanda por encima de 18 millones de Kgs, logrando cuotas superiores al 11% en volumen. En el resto de secciones las magnitudes son inferiores. Algo más del 10% en valor y el 6,2% en volumen en el caso de las conservas de pimientos, que retroceden cerca del 3,7% y el 5,6%, respectivamente.

Las únicas divisiones con evolución positiva son guisantes y judías verdes. Sus cuotas, por debajo del 5% en ambos casos, no han impedido su avance, que ha sido del 4,5% en valor en las judías (el mayor crecimiento del mercado) y del 0,7% en guisantes. La demanda ha crecido un 2,5% en las judías y un 1,4% en los guisantes.

Encrucijada empresarial
El tejido empresarial del sector de conservas vegetales puede calificarse de encrucijada o de camino que discurre por dos direcciones. De un lado, aquellas compañías que no han podido salvar sus dificultades y de otro, aquellas firmas consolidadas que se mantienen y refuerzan su actividad. Unas y otras se enfrentan a la MDD, cuyo peso alcanza más del 63% en categorías como tomate frito, arañando más del 55% en el caso de los espárragos.

Entre los que han logrado colar sus marcas en el Top 10 se encuentran Grupo Cidacos, con las referencia Cidacos ; Compre y Compare, con la marca Celorrio; IAN. Industrias Alimentarias de Navarra , que comercializa Carretilla; Riberebro, que integra Ayecue, Gvtarra y Viter; Carnes y Conservas Españolas- Carcesa-, con Apis y Fruco; Taboada Grupo, Golden Foods y Cofrusa con sus marcas homónimas; Eurocham, con Champitol y Conservas Napal con Napal, Rombo D’Oro y Napal .

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