Comertia y Barcelona Oberta señalan a Unibail Rodamco por “evitar” acuerdos de alquiler

Glòries, La Maquinista o Splau han enviado las facturas del mes de enero de gastos y de alquiler sin ninguna rebaja y sin acogerse al decreto de ley de la Generalitat.

Una gran parte de los comerciantes y restauradores de centros comerciales catalanes han mostrado su indignación por no haber podido llegar a un acuerdo con la inmobiliaria Unibail-Rodamco-Westfield (URW), propietaria de estos recintos, con el objetivo de que rebaje los alquileres ante el impacto de la pandemia. Además, el sector señala que hacen “caso omiso” al decreto Ley (34/2020), aprobado el 20 de octubre por la Generalitat, con medidas a arrendatarios.

Barcelona Oberta y Comertia han unido sus fuerzas para acusar a URW de “posponer o evitar” llegar algún tipo de acuerdo para renegociar los acuerdos de alquiler con los propietarios de los comercios y restaurantes. 

Por su parte, operarios de centros comerciales catalanes como Glòries, La Maquinista o Splau, han enviado a los propietarios de los negocios “las facturas del mes de enero con los importes íntegros de alquiler y gastos, como si los espacios hubieran estado en pleno rendimiento y rehusando de las medidas del decreto de ley”, han indicado Barcelona Oberta y Comertia en un comunicado. De hecho, “los arrendatarios obligaron a los comerciantes acogerse a la ley de la Generalitat, que permite eximirse del pago del 50% del alquiler y gastos de superficie. Por ello, buena parte de los operadores han denunciando a URW por miedo al desahucio”, han añadido.

Los comerciantes están “muy decepcionados con este arrendador” porque sigue sin tener en cuenta la crisis sanitaria, evitando el diálogo y acogiéndose unilateralmente a la reciente norma, del 22 de diciembre (Decreto-Ley 35/2020). En el comunicado, han añadido que ya “hay jueces que están adoptando medidas cautelares basas en la normativa catalana”. 

Respetar la normativa catalana de rebaja del alquiler”

El artículo 2.1 del decreto, cuenta con “una cláusula donde se específica que aquellos operadores que se hayan acogido del decreto catalán y hayan estado tres meses cerrados, pueden irse del centro comercial sin tener que pagar la cláusula de obligado cumplimento”. Con este contexto, algunas marcas de restauración han decidido acogerse a esta posibilidad para abandonar los centros y está previsto que en las próximas semanas también lo hagan otros operadores.

Por ello, Comertia y Barcelona Oberta también han denunciado “estas posturas inflexibles y poco realistas de grandes tenedores y los instan a respetar la normativa catalana de rebaja del alquiler, para poder hacer frente a la situación”.