Canadá investigará a Lululemon por presunto greenwashing

La Oficina de Competencia de Canadá investigará a Lululemon por las afirmaciones realizadas en su campaña de marketing de 2020.

La organización por el clima Stand.earth ha presentado ante la Oficina de Competencia de Canadá una petición para investigar a Lululemon por greenwashing, a raíz de la campaña de marketing lanzada en 2020 en la que la firma de moda deportiva afirmaba que sus “productos y acciones evitan el daño medioambiental y contribuyen a lograr un planeta sano”. 

Según se lee en la demanda, desde el lanzamiento de su campaña, las emisiones de gases de efecto invernadero de Lululemon se han doblado, citando datos del propio informe de impacto ambiental de la compañía publicado en 2022. Además, desde Stand.earth aseguran que ésta emplea materiales no reciclados y no biodegradables, y lanzan microplásticos a los océanos. 

Si la Autoridad de Competencia canadiense encuentra indicios de engaño en la campaña de marketing de Lululemon, desde la entidad ambiental indican que pedirán a Lululemon que retire la campaña de su web y el resto de formas de comunicación y publique una disculpa formal a los clientes del país norteamericano. Se sumaría una multa de hasta un 3% de sus ingresos anuales, destinados al Fondo de Daños Medioambientales de Canadá. 

“Lululemon se beneficia de una cuidada imagen de sostenibilidad ambiental y bienestar, y afirma que fabrica productos que contribuyen a un ecosistema sano, pero su crecimiento exponencial se ha construido en base a combustibles fósiles, ropa fecha literalmente de gas fracturado para una fabricación contaminante que amenaza la salud de las comunidades del en el Sur Global”, ha señalado en un comunicado Tzeporah Berman, director del programa internacional de Stand.earth. 

Desde Lululemon han reconocido a Fashion Dive que la mayoría de las emisiones recogidas en su informe de impacto de 2022 proceden de una cadena de suministro mayor. “Abordar la crisis climática y escalar soluciones de forma significativa requiere colaboración, inversión y transparencia en la cadena de suministro”, han señalado. Informan, además, que tienen previsto una serie de inversiones para alcanzar sus objetivos climáticos en 2030 y ser neutrales en carbono en 2050.