El pago en efectivo, impulsado por la vacunación, primera opción en tienda

El pago en efectivo continúa entre los métodos de pago preferidos en España, a pesar del incremento de los pagos digitales por la COVID-19.

A pesar de que un mayor número de compradores ha conocido y se ha habituado al pago digital, todavía en España siguen siendo mayoría los usuarios que optan por realizar sus compras con efectivo. 

Según los datos recogidos en el informe Impacto de los pagos en las estrategias de marketing y el journey del cliente, elaborado por Ditrendia y Pecunpay, en colaboración con la Asociación de Marketing de España (AMKT), a medida que más ciudadanos se han vacunado y se ha ido reactivando la economía, el consumo y, con él, el pago en efectivo, han vuelto al alza. 

Los datos publicados por el Banco de España y recogidos en el estudio muestran cómo en el segundo trimestre de 2021, las operaciones de compra en TPV en comercio se han incrementado un 41,22%, pero también la retirada de efectivo en cajeros (+35,11%). El efectivo, además, continúa siendo el principal método de pago en España, al acaparar el 40% de las transacciones realizadas en el punto de venta. 

No obstante, los pagos digitales continúan ganando más adeptos en nuestro país. En el último año, España fue el país europeo que más creció en el uso de smartphone para efectuar sus compras (+60%) y un 42% asegura que compra a través de este con mucha más frecuencia. A día de hoy, más de 28 millones de usuarios residentes en España realizan pagos digitales, un volumen de 45.000 millones de dólares, un 5,8% más que en pasado año

Entre los medios de pago digitales que más han crecido en su uso, el informe destaca aquellos sin contacto, gracias a la mayor aceptación por parte de los consumidores, pero también de los retailers, donde los más reacios los han incorporado a su catálogo como medida de seguridad. 

Tendencias

El informe recoge asimismo la tendencia al alza de las soluciones Compra ahora y paga más tarde, con un mercado que “se abrirá para buscar una mayor personalización del precio al cliente y otras formas de financiación más allá de la tarjeta bancaria. Y del pago con criptomonedas, aunque todavía existen retos y frenos a su crecimiento. “A medida que las generaciones más jóvenes se decanten por realizar sus pagos con criptomonedas, estos métodos tendrán más interés para los comercios y se impulsará su aceptación”.