Los “coffee shops” llegan a Estados Unidos

Un nuevo y enorme mercado. El 1 de enero, mañana, abren en Washington y Colorado, los primeros “coffee shops”, tiendas de venta y consumo de cannabis con fines recreativos. La consultora ArcView estima que la medida traerá un aumento en las ventas legales de marihuana de un 64 % este año, hasta los 2.340 millones de dólares. Al que hay que añadir las esperadas afluencias turísticas.

El negocio de los nuevos “coffee shops” va más allá de la venta de la, para muchos, preciada hierba. Algunas empresas turísticas llevan meses ofreciendo tours completos a turistas que se espera lleguen a los famosos resorts de esquí en Colorado, cautivados por el deporte y lo que ya se ha dado en llamar una “nueva cultura de la yerba al estilo holandés”

La marihuana medicinal es legal y está regulada en 19 estados estadounidenses. Colorado y Washington han dado un paso más, legalizando el consumo de cannabis con fines recreativos por medio de un referéndum realizado el pasado mes de noviembre y la posterior legislación que entra en vigor el primer día de 2014. Para su correcta vigilancia, han creado un sistema en el que son las autoridades locales las que supervisan el cultivo, distribución y comercialización de la hierba “por el bien de los consumidores” Y el consiguiente impuesto fiscal.

En total, en el estado de Colorado, se han concedido licencias para 348 tiendas que venderán hasta 28 gramos de cannabis por operación. En Washington, 3746 solicitudes de licencia para su venta, de ellas 867 para tiendas.

Para muchos, la medida servirá de importantes ingresos fiscales para el Estado, para las economías locales al atraer turistas y visitantes de otros estados próximos y al tiempo eliminará el mercado negro, aunque reconocen que la demanda acabará siendo superior a la oferta lo que llevará a un aumento de precios.

Para los opositores, la legalización del cannabis es “un terremoto en la política de control de drogas” solo comparable al del final de la llamada Ley Seca que en la década de los años veinte del siglo anterior que mantuvo prohibido el alcohol en los Estados Unidos.