Lidl se compromete a reducir el uso del plástico en un 30% hasta 2025

El objetivo parte de utilizar al menos un 25% de material reciclado y garantizar la reciclabilidad de sus envases de marca propia hasta 2025.

Lidl continúa su estrategia sostenible, manteniendo su compromiso de disminuir el plástico en su negocio. La enseña alemana ha ampliado su objetivo para seguir reduciendo el uso de este residuo en un 30% hasta 2025 y en un 35% hasta 2027.  En la actualidad, ha superado el objetivo del 20%, alcanzando ya el 26%.

Este compromiso parte de una estrategia internacional REset Pastic que Lidl lleva impulsando durante años y que afecta a 30 países, donde está presente la cadena del gran consumo. Dentro de estos objetivos, se incluye utilizar al menos un 25% de material reciclado y garantizar el reciclaje de sus envases de marca propia hasta 2025. Todo ello sin olvidarse de sus cinco áreas de actuación: Reducir, Rediseñar, Reciclar, Reidear y Recoger.

En otro orden de cosas, Lidl anunció el pasado mes de junio un proyecto en colaboración con Gravity Wave para llevar a cabo una recogida de plásticos en las inmediaciones del Mar Mediterráneo y puertos de las Islas Baleares con el objetivo de poder recolectar hasta 15.000 kg de plástico y utilizar dichos residuos para darle una segunda vida.

Acciones sostenibles conseguidas

Además de ser la primera cadena en eliminar las bolsas de plástico o artículos de dicho material de un solo uso, Lidl destaca por medidas como la sustitución de los envases de plástico por celulosa o compostables en toda su gama de frutas y verduras bio, como el  lanzamiento de la primera botella de agua de marca propia: Esto supuso el ahorro de más de 185 toneladas anuales de plástico virgen o el cambio de envase de sus huevos a celulosa, que conlleva la reducción de cerca de 500 toneladas de plástico anuales, entre muchas otras.

En los últimos seis años, la cadena ya ha rediseñado más 400 de sus artículos de marca propia que han supuesto la sustitución total del plástico por otros materiales, contar con más plástico reciclado y/o lograr una mayor reciclabilidad de sus embalajes. En este sentido y en palabras de Michaela Reischl, directora de RSC de Lidl España: “[…] Un desafío importante que afecta a toda la industria, ya que necesitamos alternativas que, además de ser más amigables con el medio ambiente, sean resistentes, seguros para la alimentación, sin perder la calidad y frescura de nuestros productos e intentando no repercutir el coste que supone ser más sostenible a nuestros clientes”.

Lidl identifica todos sus envases rediseñados con el sello “Envase eco-responsable”, con el objetivo de trasladar a sus clientes de forma transparente sus proyectos en favor del medio ambiente. Además, aquellos artículos cuyo envase está compuesto en su totalidad por material reciclado, incorporan un distintivo que resalta dicha particularidad, como es el caso de la botella de agua Naturis 100% rPET o la totalidad de sus zumos de nevera.

Por otro lado, conscientes de la problemática de los microplásticos, Lidl también fue pionera en intentar buscar una solución, ya que desde 2021 ha reformulado más de 400 artículos de detergencia, limpieza y cosmética. Se trata de partículas de tamaño inferior a cinco milímetros que dificulta seriamente su descomposición en el medio ambiente.