Cómo ahorrar energía en una empresa

Las nuevas tecnologías permiten ahorrar energía en la empresa, optimizando el gasto y reduciendo los costes de manera notable mediante el uso de reguladores, instalando paneles solares fotovoltaicos o haciendo uso de LEDs.

El ahorro de energía es muy importante, ya que supone un gasto tanto para empresas como comercios y negocios. A medida que una sociedad se desarrolla, consume más energía; pero no siempre lo hace de la forma más eficiente. Por eso, es importante usar los recursos energéticos de forma eficiente, evitando el derroche que afecta tanto al medio ambiente como a la economía.

Las nuevas tecnologías permiten ahorrar energía en la empresa, optimizando el gasto y reduciendo los costes de manera notable mediante el uso de reguladores, instalando paneles solares fotovoltaicos o haciendo uso de LEDs.

 Un uso concienzudo y responsable por parte de las personas también son claves para ahorrar energía eléctrica en comercios, empresas y negocios. No obstante, en este artículo os vamos a dar algunos consejos rápidos de cómo ahorrar energía en la empresa.

 Consejos para ahorrar energía en una empresa

No permitas que el despilfarro energético se convierta en uno de los flancos desprotegidos de tu negocio. Aplica los siguientes consejos para reducir el importe de tus facturas.

1. Sistemas de ahorro energético

Existe una gran variedad de dispositivos o recursos para reducir el consumo de energía, a través de una climatización eficiente. Desde aislamientos térmicos hasta medidores de energía para los radiadores. Solo hay que saber cuál se ajusta mejor a tus necesidades.

2. Apagar aparatos eléctricos que no se usen

Parece un consejo bastante obvio, pero ¿cuántas personas apagan los aparatos eléctricos al salir de la oficina o al terminar de usarlos? Si comenzamos a poner en práctica este hábito, evitamos el consumo en stand by o consumo fantasma.

 Muchos aparatos eléctricos (impresoras, ordenadores, etc.) siguen consumiendo electricidad, aunque no estén en funcionamiento.

3. Usar luz natural siempre que sea posible 

Además de ahorrar energía, permite una iluminación homogénea que contribuye a mejorar la sensación de bienestar general, y por lo tanto, permitirá lograr un mayor rendimiento laboral.

 Es fundamental intentar disponer siempre de luz natural, ¿cómo? Sacándole el máximo partido a las horas de luz.

4. Hacer uso de luces LED

Actualmente ya no se usan las bombillas tradicionales. Por su duración y eficiencia, las luces LED son la iluminación que se debe tener siempre en un negocio, e incluso en casa.

5. Usar adecuadamente los sistemas de climatización

Normalmente los principales consumidores de energía en un edificio son: la calefacción y el aire acondicionado.

 Para una mejor eficiencia energética de climatización hay que optimizar la climatización según los siguientes aspectos:

  • El horario y frecuencia de uso de la zona/área.
  • La actividad que se realiza en cada zona/área.
  • La orientación de la zona, considerando los aportes energéticos solares.

 Además, es importante limpiar los filtros del aire acondicionado o calefacción, ya que, en muchas ocasiones, no funcionan al 100%, debido a una obstrucción.

6. Integrar sistemas de energía solar fotovoltaica

Una de las opciones más rentables para ahorrar energía es utilizar la energía solar en nuestro propio beneficio, instalando tejados solares o paneles fotovoltaicos en la fachada del edificio.

 Se trata de sistemas que requieren muy poco mantenimiento y duran más de 30 años, proyectan una imagen innovadora de la empresa, y aumentan el valor arquitectónico y tecnológico del edificio.

 Además, los sistemas fotovoltaicos contribuyen al mejoramiento del clima interno del edificio por la menor absorción del calor.

 7. Elige productos de mayor eficiencia energética

Es importante si se renuevan los aparatos eléctricos de una empresa verificar que estos lleven la etiqueta de ahorro energético de clase A.

Se estima que un aparato de escala A puede llegar a consumir un 55% menos que otros electrodomésticos sin esa calificación.

 Pero, sin duda alguna, la concienciación de las personas sobre el ahorro energético es fundamental. Por lo que es conveniente que una empresa conciencie a su plantilla de la importancia de la sostenibilidad.