Del no, al ¿por qué no? No queda otra. O esperar a que lleguen de fuera a enseñar el camino. El sector de alimentación es, en principio, un sector más. Con el privilegio a su favor de estar formado por productos de consumo de primera necesidad o, en todo caso, básicos y de compra frecuente. Un sector heterogéneo – desde perecederos a secos- necesitado de gestores con profundos conocimientos en el arte de la negociación, la comercialización y la venta. Una venta en volumen, más que en valor, y de escaso margen.