Francia multa a Shein con 150 millones de euros por uso indebido de cookies
El minorista asiático ya recibió una multa de 40 millones de euros el pasado julio en Francia por aplicar descuentos engañosos.
Shein vuelve a situarse en el punto de mira de las autoridades francesas. La Comisión Nacional de Informática y Libertades (CNIL), organismo encargado de velar por la protección de datos de los consumidores, ha sancionado a la compañía asiática con una multa de 150 millones de euros por el uso indebido de cookies en su web.
Según la investigación, la página de Shein en Francia incumplió las normas al instalar archivos de seguimiento en los dispositivos de los usuarios incluso cuando estos habían rechazado su consentimiento. La CNIL señaló además que la plataforma no respetaba las elecciones de los internautas ni les informaba correctamente sobre el tratamiento de sus datos personales, lo que constituye una vulneración del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la Unión Europea.
De acuerdo con Reuters, la comisión basó la magnitud de la sanción en varios factores: la reiterada falta de cumplimiento por parte de Shein, el volumen de usuarios afectados —más de 12 millones de visitantes mensuales en Francia— y la envergadura de la compañía, que ingresó en Europa 7.684 millones de euros en 2023 a través de su filial irlandesa. Shein, por su parte, ha anunciado que apelará la decisión y ha calificado la multa de “desproporcionada y políticamente motivada”. La empresa asegura haber reforzado sus prácticas de protección de datos desde agosto de 2023, tras colaborar con la CNIL en las investigaciones.
La sanción llega apenas unos meses después de que Shein recibiera en Francia otra multa de 40 millones de euros por publicidad engañosa, al aplicar descuentos considerados fraudulentos en su plataforma digital. En aquel caso, el organismo de control estimó que la compañía indujo a error a los consumidores con supuestas rebajas que no reflejaban precios reales de referencia.
El caso se enmarca en un contexto de creciente presión regulatoria sobre el fast fashion en Francia. El Parlamento galo estudia un proyecto de ley pionero que busca restringir la publicidad de estas compañías, con el objetivo de reducir el impacto medioambiental y social de un modelo de consumo basado en la producción masiva y el bajo coste. De aprobarse, medidas como la prohibición de campañas publicitarias o impuestos específicos podrían transformar radicalmente el negocio de Shein en el país.
Francia multa a Shein con 40 millones por aplicar descuentos engañosos