La caída de la innovación amenaza con una pérdida de 20.000M€ en el gran consumo
El descenso en el lanzamiento de nuevos productos y la escasa distribución están dejando al sector al borde del estancamiento.
La innovación en el sector del Gran Consumo en España atraviesa su momento más crítico. Según el informe “Radar de la Innovación 2024”, elaborado por la consultora Kantar, la creación de nuevos productos ha descendido un 48% desde 2010, situándose en mínimos históricos.
El estudio, que analiza anualmente la evolución de la innovación en categorías como alimentación, bebidas, droguería y cuidado personal, subraya que son las marcas del fabricante (MDF) las que aún mantienen viva la innovación, ya que solo el 4% de los nuevos productos provienen de marcas de distribuidor (MDD). Además, el 51% de estas innovaciones procede de marcas españolas.
Las categorías de alimentación y bebidas han sido las que más novedades introdujeron en 2024. De hecho, nueve de las diez innovaciones más exitosas del año pertenecen a estos sectores, incluyendo productos como licores, embutidos, helados y bebidas sin alcohol.
Falta de distribución adecuada
Sin embargo, las marcas están dejando de innovar. ¿El motivo? La falta de una distribución adecuada. Las innovaciones que triunfaron alcanzaron una distribución media del 43%, mientras que las que fracasaron no superaron el 19%.
Debido a la escasa presencia de estos nuevos productos en los canales de distribución, la tasa de éxito ha caído hasta el 24%, frente al 57% de media registrado entre 2014 y 2020. Así, esta tasa es prácticamente la misma que cuando no se lanza nada novedoso, lo que explica en parte por qué cada vez hay menos innovación.
El informe va más allá y presenta una previsión preocupante para los próximos diez años: la media de innovaciones podría reducirse hasta sólo 13 al año. Esta cifra supone prácticamente la desaparición de la innovación en el mercado, lo que implicaría una pérdida cercana a los 20.000 millones de euros.
“Los fabricantes somos muy prudentes por dos motivos: nos defendemos de la ‘guerra’ con la marca del distribuidor y lidiamos con los problemas de distribución”, advierte Fernando Fernández Soriano, presidente de Promarca.
Foro de reflexión constructivo
Este desequilibrio entre innovación y distribución genera un círculo vicioso: si los productos no llegan al consumidor, no pueden demostrar su valor; y sin rentabilidad, la inversión en innovación se detiene. Además, se observa una división creciente en el retail entre las cadenas que apuestan por productos novedosos y aquellas que optan por un surtido más limitado.
Ante este panorama, Promarca ha propuesto la creación de un foro de reflexión constructivo que reúna a fabricantes, distribuidores y administraciones públicas para identificar las barreras actuales, fomentar un entorno más favorable a la innovación y, quizá, establecer unos mínimos de regulación. Tanto César Valencoso, director de Consumer Insights en Kantar, como Fernández Soriano han coincidido en la necesidad de una colaboración real entre todos los actores del sector para revitalizar la oferta y responder mejor a las nuevas necesidades de los consumidores.
La innovación no solo representa una vía de crecimiento para las empresas, sino también un elemento clave para mantener la competitividad y ofrecer mayor valor al consumidor final. Sin ella, el sector corre el riesgo de estancarse.