Una Navidad casera, marca el crecimiento de alimentación y gran consumo

La alimentación, seguida de los frescos y las bebidas, son las categorías que han contribuido al crecimiento total del gran consumo. Por el contrario caen los productos de perfumería durante las Navidades.

La celebración de las pasadas Navidades, sin duda, ha sido diferente al haber estado marcadas por el efecto de la pandemia.  Como consecuencia de esto, durante este periodo (tres semanas, desde el 21 de diciembre 2020 hasta el 10 de enero 2021) el gran consumo creció, según datos de IRI, en los canales físicos en un +3,0 % en valor frente a las fiestas pasadas. 

Y en concreto, han sido la alimentación, seguida de los frescos y las bebidas, las categorías que han contribuido al crecimiento del total gran consumo, mientras que la perfumería e higiene y la droguería y limpieza han aportado un crecimiento negativo. Esta situación se debe a que alimentación y bebidas están absorbiendo parte del consumo que antes hacíamos fuera del hogar.

Si aislamos el especialista de perfumería y Droguería Moderna, canal que se está viendo fuertemente afectado como consecuencia de la Covid y que parece que no consigue recuperarse en el periodo navideño, el crecimiento del total gran consumo alcanza la cifra de +4,9 %.

Comestibles, protagonistas de estas Navidades

En este contexto, los comestibles han sido los protagonistas en unas navidades muy caseras. Así, su crecimiento ha sido del 6,6 %, frente al descenso del 12,2 % de los productos no comestibles (evolución en valor, respecto del año anterior).

Por tipología de marca, en los comestibles, la marca de fabricante es la ganadora, creciendo a un ritmo del 9,5 % (en canales físicos, excluidos frescos), frente al 3,9 % registrado por la marca de distribuidor. Sin embargo, en no comestibles la marca de fabricante ha descendido un 15,8 %, frente a la disminución más moderada de la marca de distribuidor (5 %).

Es precisamente este traslado del consumo a casa la razón de la posición de ganador de productos como los surtidos de quesos, el pescado y marisco y los asociados a momentos festivos, como es el caso de los vinos, chocolate y bebidas espirituosas. La preocupación por la higiene también identifica como grandes aventajados de este periodo las mascarillas y las lejías y desinfectantes. En el extremo contrario, debido a la limitación de las reuniones sociales, encontramos la cosmética decorativa, los productos de afeitado y las colonias y perfumes. Por su parte, las limitaciones para viajar y la ausencia de viajes a zonas más cálidas o para practicar deportes de nieve han llevado a los productos solares a la posición de perdedores,