Tecnología en la empresa, 4 de cada 10 desconoce cómo sacarle el máximo partido

A la hora de invertir en tecnología, un 45% de empresas españolas asegura no saber cómo integrarla en sus sistemas
A la hora de invertir en tecnología, un 45% de empresas españolas asegura no saber cómo integrarla en sus sistemas

La transformación digital se ha convertido en prioridad para un gran número de compañías españolas. Pero a la hora de iniciar la aventura e invertir en tecnología, un 45% no le saca el máximo rendimiento. Algo que también perciben los empleados, donde un 29,3% indica además que sus empresas deberían mejorar a la hora de facilitar las herramientas necesarias para llevar a cabo la transformación digital. 

Así lo señala el último estudio de Vanson Bourne donde se analiza el uso de la tecnología para la digitalización de las firmas españolas. Un 49,3% considera la transformación digital una tarea prioritaria en la compañía y asegura tener un plan en marcha. 

En la práctica, sin embargo, casi la mitad de las firmas españolas invierte en tecnología sin integrarlo en sus sistemas y, por ende, no le sacan el máximo partido. Esto sucede porque a la hora de destinar recursos a una determinada tecnología, desconocen cómo integrarla con las herramientas con las que ya cuentan

El estudio también refleja las distintas estrategias que siguen las empresas para impulsar la digitalización. El 36,1% afirma que uno de los factores clave es conseguir una mayor innovación de productos y servicios. Mientras que un 87% señala que las soluciones de experiencia de cliente y de experiencia de empleado son críticas para el éxito de la transformación digital. Aunque en este caso se requieren datos integrados y precisos. 

De igual modo, un 53,3% de firmas considera que la Inteligencia Artificial y los procesos de automatización (RPA) se alzan como las tecnologías más importantes para conseguir un crecimiento de los ingresos y, a su vez, lograr los objetivos de transformación digital. Más de la mitad de los entrevistados piensa además que gracias a la modernización y a la sustitución de sistemas críticos, sus costes se reducirían entre un 5% y un 10%.