Currás, ex-CEO de DIA, investigado por «falsedad contable» para garantizar el cobro de bonus

Ricardo Currás - Consejero Delegado de Grupo DIA_2
Ricardo Currás, consejero delegado de DIA hasta 2018, ha sido citado como investigado por el juez Alejandro Abascal, al frente del Juzgado Central de Instrucción número 6 de Madrid,  por «administración desleal y falsedad contable» en los estados financieros de la empresa  con el fin de «garantizar la retribución variable por objetivos». 

Junto a Currás, el auto cita como investigados (antigua figura de imputado)  a su número dos Amando Sánchez y  a los directores comerciales Luis Martínez Gallardo y Juan Cubillo, el director financiero Antonio Arranz Martín y al auditor de KPMG,  Carlos Peregrina García, que fue quién revisó las cuentas de 2017.

El juez atiende así la petición de la fiscalía que acusaba a Currás y a su equipo de haber trazado un plan para maquillar las cuentas a través de «prácticas contables irregulares«, inflando el ebitda  en casi 52 millones  de euros.   El dirigente, dice el auto,   «ideó un plan para maquillar las cuentas y alterar algunas magnitudes » con el resultado final de un engorde en los resultados de «51,8 millones de euros» que podrían garantizar «el cobro variable por objetivos  aplicado en forma de bonus de retribución variable que en 2016 se elevó a 616.620 euros.

En el citado ejercicio y como no se  alcanzaban los objetivos con la consecuencia de un importante descenso en el ebitda, se sucedieron  «prácticas contables irregulares»  en las que el ex-consejero delegado habría tenido-supuestamente- un papel activo en diseñar un plan que acabó inflando la cifra en 51,8 millones de euros. La estrategia  afectó también a su división en Brasil, donde «contó con la colaboración de Antonio Coto, en aquella fecha  máximo responsable para América Latina y posterior sucesor del propia Currás al frente del Grupo DIA.

La investigación proviene de la querella que un grupo de accionistas minoritarios  presentaron en mayo del año pasado cuestionando la veracidad de las cuentas de 2017 y que un año más tarde provocarían el desplome bursatil de la compañía.  La acusación, incluye a Ricardo Currás y  a todo el consejo de DIA como responsable de la formulación de las cuentas  y a KPMG como auditor encargado de la revisión de cuentas del citado ejercicio.