Los fraudes en ecommerce aumentan durante la crisis del coronavirus

Aumentan los fraudes en ecommerce por el coronavirus
Los fraudes en ecommerce aumentan durante la crisis del coronavirus.

La crisis mundial que está generando el coronavirus está resultando ser una oportunidad perfecta para los piratas informáticos. El confinamiento que exige el estado de alarma ha aumentado considerablemente las ventas en ecommerce y con ellas las estafas online

“El COVID-19 está teniendo un impacto casi incalculable en todo el mundo, y apenas estamos todavía comprendiendo su alcance potencial», explica Yinglian Xie, CEO y cofundador de DataVisor, un proveedor de fraude impulsado por inteligencia artificial. «La actividad fraudulenta explotadora es una de las muchas preocupaciones que necesitamos abordar urgentemente». 

Xie asegura que es importante entender que cuando se trata de fraude en transacciones online, «diferentes industrias y sectores se están viendo afectadas de múltiples formas por este virus, y  no hay una respuesta única para todos».

En una encuesta realizada recientemente por TransUnion a 1.068 estadounidenses mayores de 18 años, el proveedor de soluciones de pago descubrió que el 22% de los usuarios había sido objeto de fraudes de comercio electrónico con productos relacionados con el coronavirus. En 2019 la compañía ya informó de un aumento del 347% en la sustracción de cuentas y un incremento del 391% en los intentos de fraude de pedidos online, contra sus clientes de todo el mundo. 

Una práctica que está favoreciendo estos robos es la nueva medida de entrega de pedidos web sin contacto, donde los transportistas de paquetes no necesitan la firma de los destinatarios. «Esto es interesante desde una perspectiva de fraude», pues  «la dirección de envío es un dato fundamental, y esto elimina ese pilar», asegura Colin Sims, director de operaciones de Forter, proveedor de soluciones de protección contra fraudes. 

Al no requerir requerir firma y no tener contacto con el repartidor, los hackers pueden acceder y manipular la dirección e identidad de un destinatario a su antojo y hacer que el punto de entrega sea redirigido a una ubicación diferente

Otro problema es el aumento de BOPIS. El “cómpralo online,  recógelo en tienda” se ha disparado en los supermercados y comercios minoristas, debido a esta situación excepcional de confinamiento y prevención de contagio. «Eso convierte las transacciones en un cumplimiento mucho más inmediato, por lo que los retailers necesitan decisiones más rápidas y más automatización en todos sus procesos de prevención de fraude», dice Sims

Por otro lado, con tantas personas teletrabajando, los equipos de revisión de fraude de comercio electrónico, que realizan controles manuales de compras para detectar anomalías, están dispersos, lo que dificulta la cohesión y la efectividad del equipo. Desde esa perspectiva explica Sims,  el trabajo desde casa está aumentando la fricción y la distracción». 

Las tarjetas de regalo son otra área problemática a tener en cuenta, pues se han promovido mucho entre los consumidores como forma de ayudar a los retailers que han tenido que cerrar sus locales. «Desafortunadamente, son una de las mejores vías para los estafadores, ya que los códigos son fáciles de transferir y obtener el dinero es muy rápido», cuenta Uri Arad, fundador y vicepresidente de Identiq. Este “es otro caso en el que tanto los consumidores como los comerciantes deben tener mucho cuidado», previene.

Consejos para evitar este tipo de estafas 

Para evitar este tipo de estafas, idealo.es, comparador de precios web, recomiendan seguir una serie de pautas. 

Asegurarse de que la página es segura. Para ello hay que fijarse si en el navegador aparece el símbolo del candado cerrado, un gesto que certifica que el sitio web está protegido, y por tanto, los datos del usuario no son públicos y están a salvo.

Conocer la opinión de los clientes. Buscar opiniones y reseñas de otros usuarios puede ayudarte aclarar cualquier duda existente sobre la autenticidad, tanto del producto, como de la tienda.

Confirmar que el precio tiene el IVA incluido. Si los precios son bastante bajos, seguramente es porque no incluye los porcentajes legales y la cantidad a entregar sea mayor que la que en un principio parecía.

Confiar en los comercios con varias formas de pago. Si hay disponibles varios métodos de pagos es indicativo de que la tienda online es de confianza de cara a bancos u otras plataformas de pago online seguro. Es importante recordar que las pasarelas de pago deben incluir doble autentificación.

Confirmar otros aspectos, antes de comprar. Por último, para validar cualquier producto o ecommerce es necesario comprobar el cumplimiento de la norma vigente de devoluciones. Así como las condiciones legales existentes.